Bodegas ARTUKE
BODEGAS ARTUKE, es una bodega familiar que transmite cosecha tras cosecha su apuesta por la calidad. Una familia dedicada en cuerpo y alma al cultivo de la viña, la saga MIGUEL BLANCO comienza su proyecto personal en 1991. Elaboran únicamente con las uvas de sus viñedos, se tratan en su mayoría de viñedos viejos. Siguiendo la tradición de la región elaboran su vino de acceso, mediante la maceración carbónica, que unida a la aplicación de modernas técnicas enológicas permiten obtener vinos de gran calidad. De la misma manera se sigue pisando la uva con los pies.
Poseen 22 hectáreas de viñedo propio repartidas en 32 parcelas entre las localidades de Baños de Ebro y Ábalos, que convierten al proyecto en uno de los más pequeños y cuidados de la zona. Las diferencias climáticas, de altitud y tipos de suelo entre ellas enriquecen y aportan un matiz diferenciador a cada vino, reforzado por un sistema de plantación en vaso y por una recolección manual. En ARTUKE llevan una viticultura respetuosa con el medio ambiente, aplicando pautas biodinámicas para conseguir la mayor expresión del terruño. Durante los últimos años, el objetivo de la bodega ha sido y es la búsqueda y recuperación de viñedos abandonados y suelos con carácter. En la elaboración, todos sus vinos fermentan en depósito. Para las crianzas utilizan madera de diferentes usos, pero todas en formatos grandes. Lo que se busca en ARTUKE es conseguir vinos auténticos que expresen la naturaleza del paisaje.
Bodegas Artuke forma parte del grupo de productores RIOJA ´N´ROLL, una asociación comprometida con la elaboración de vinos de terruño y con identidad. Conocedores del patrimonio que ellos gestionan, trabajan para conservarlo, no para transformarlo. Es una de las razones por las que se empeñan en cultivar sus 32 parcelas en vaso, como se hacía antes, incluso en sus nuevas plantaciones.
Ese compromiso de conservación los ha llevado a recuperar viñedos como el de La Condenada, una parcela abandonada con suelos de arena y subsuelo de arenisca que adquirieron en 2012 y que está plantada con viñas viejas de tempranillo, graciano, garnacha y algo de Cagaza o Calagraño (similar al palomino fino). Junto a esta parcela en Baños del Ebro van comprando poco a poco pequeñas parcelas adyacentes que están abandonadas pero que años atrás fueron también parte de la finca y de la que han conseguido juntar ya 7.5 hectareas.
Otro de sus vinos de parcela es El Escolladero, un ensamblaje de Tempranillo y Graciano, de una finca plantada en altitud hace más de 60 años sobre suelos arcillo-calcáreos en el término de Ábalos.
Paso Las Mañas, es una parcela que se encuentra en la ladera más alta de Samaniego, con suelos de arcilla y cal, y muchas piedras en superficie. Plantada en 2013 con Tempranillo de su Finca de los Locos.
Finca de los Locos, es otra de sus viñas emblemáticas en Baños del Ebro. Se llama así en honor de su abuelo, que tuvo la visión de comprar una parcela de casi 3 hectáreas en una terraza a 550 metros de altitud sobre el rio Ebro. Corría el año 1950 y a los vecinos de Baños aquello de plantar viñas en una finca tan poco productiva con suelos de arena, gravas y tres veces más de cal que la media de la zona les parecía una locura. Esa bendita locura del abuelo testarudo es hoy una de sus fincas más reconocidas, plantada con tempranillo y graciano injertado con selección masal.
Su gama de vinos de pueblo incluye dos etiquetas: Artuke, un vino de maceración carbónica elaborado de forma tradicional con raspón. Y Pies Negros, con uvas de Ábalos y base de tempranillo y un 10% de graciano.
Recientemente han incorporado un nuevo vino a su gama Trascuevas, se trata de su primer vino blanco, elaborado con uvas de las variedades Viura, Malvasía y Palomino fino. Procedentes de tres viñedos de más de 50 años y con suelos arcillo calcáreos, que están situados en Baños de Ebro, Ábalos y Samaniego. Tiene una crianza sobre lías de 10 meses, la mitad es criado en barricas de roble francés de 500 litros y la otra mitad en hormigón.
